29 de septiembre de 2008

Limón y Pimienta

Crucé la calle hacia la tienda,
había gente saliendo de la iglesia,
el calor moría entre nubes anaranjadas,
familiaridad de un sueño constante.

Compré el experimento sin miedo a las consecuencias,
regresé y ella me esperaba descalza.
La tele prendida y el mundo en silencio.
Después de todo, mi vida ya no es igual.

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